¿Cansado del lavado de imagen verde? Las telas ecológicas certificadas de April Su son una auténtica maravilla: aquí te explicamos por qué es importante (Versión en inglés)
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Entra hoy en cualquier tienda de moda o navega por una boutique online y verás la palabra «sostenible» por todas partes en las páginas de productos. Pero detente un momento: ¿Qué significa esa etiqueta? de hecho ¿Qué significa esto? ¿Se refiere a una marca que usa un 5 % de poliéster reciclado y se autodenomina «ecológica»? ¿O a una tela «natural» cultivada con pesticidas dañinos y transportada desde la otra punta del mundo, dejando una enorme huella de carbono? Esto es lavado de imagen verde: el culpable silencioso de la industria que deja a consumidores y empresas con la sensación de haber sido traicionados, confundidos y atrapados entre las buenas intenciones y el verdadero impacto ambiental.
Para las pequeñas marcas, los diseñadores independientes e incluso los grandes minoristas, la lucha por encontrar auténticamente Colaborar con socios sostenibles es una realidad. Quieres crear una colección que refleje tus valores, pero verificar el origen, las certificaciones y el proceso de producción de cada tejido requiere tiempo, dinero y conocimientos especializados que quizás no tengas. Ahí es donde entra April Su, no solo como fabricante, sino como un aliado transparente en tu camino hacia la sostenibilidad.
Fundada en 2023 y con sede en Guangdong, China, April Su pertenece en su totalidad a Guangzhou Hengsong Limited, una empresa que se ha labrado una reputación por ofrecer soluciones tangibles y certificadas, más allá de la exageración ecológica en el mundo de la moda. A diferencia de las marcas que se escudan tras vagas afirmaciones "ecológicas", la gama de tejidos de April Su cuenta con el respaldo de dos de las certificaciones más rigurosas del sector: GOTS (Estándar Global de Textiles Orgánicos) y GRS (Estándar Global de Reciclaje). Veamos qué significa esto para ti: la certificación GOTS garantiza que cada prenda de algodón orgánico se elabora con algodón cultivado sin pesticidas ni fertilizantes sintéticos, mediante métodos agrícolas que ahorran agua y protegen la salud del suelo. La certificación GRS, por su parte, garantiza que el algodón y el poliéster reciclados se rastrean hasta sus fuentes originales (como botellas de plástico posconsumo o restos de tela preindustriales) y se procesan en instalaciones que cumplen con estrictos estándares ambientales y sociales: sin atajos ocultos, sin prácticas laborales poco éticas, sin letra pequeña engañosa.
Pero April Su no se limita a las certificaciones. También entiende que la sostenibilidad debe ser accesible, no solo creíble. Para prendas de confección confeccionadas con algodón (un material básico para la mayoría de las marcas), la cantidad mínima de pedido (MOQ) es de tan solo 20 unidades, ideal para pruebas de lotes pequeños, lanzamientos de ediciones limitadas o diseñadores independientes que no desean comprometerse con un inventario excesivo. Para tejidos ecológicos más especializados, como el algodón orgánico, el cáñamo o el poliéster reciclado, la MOQ es de 100 unidades, aún muy por debajo de los más de 500 requisitos de muchos fabricantes tradicionales. Esta flexibilidad le permite priorizar la sostenibilidad sin exceder su presupuesto ni asumir riesgos innecesarios.
Por ejemplo, una pequeña marca de bienestar quería lanzar una línea de ropa cómoda y ecológica. Antes de asociarse con April Su, habían probado con otros dos fabricantes "sostenibles": uno utilizaba algodón "orgánico" sin certificación, de tacto áspero y que encogía tras el primer lavado, y el otro exigía un pedido mínimo de 300 unidades, lo que les habría dejado con stock sin vender. Con April Su, encargaron 50 prendas de algodón orgánico con certificación GOTS, probaron el ajuste y la comodidad con sus clientes y, tras recibir comentarios positivos, aumentaron el pedido a 150 unidades, con la tranquilidad de saber que cada prenda era realmente respetuosa con el planeta.
En definitiva, la moda sostenible no se trata de cumplir con una cuota ni de usar una etiqueta de moda. Se trata de tomar decisiones con las que puedas estar seguro: decisiones que protejan el planeta, respeten a los trabajadores y aporten valor a tus clientes. Los tejidos certificados, los procesos transparentes y las condiciones flexibles de April Su eliminan las dudas al respecto. Así que, si estás cansado de lidiar con el lavado de imagen verde y listo para crear una colección tan ética como elegante, es hora de dejar de lado las modas pasajeras y colaborar con un fabricante que predica con el ejemplo.